Lentes de contacto
Introducción
En este artículo, exploraremos la diversidad de lentes de contacto disponibles en la actualidad y sus características, con un enfoque especial en la importancia de la oxigenación de la córnea. También abordaremos consideraciones clave al seleccionar lentes de contacto y su impacto en la vida cotidiana, la salud ocular y la comodidad.
Clasificación de Tipos de Lentes de Contacto
Hoy en día, podemos clasificar las lentes de contacto en tres categorías principales.
El primer grupo está formado por las lentes de contacto blandas (LC blandas), que son las más populares en la actualidad. Estas lentes han evolucionado con el tiempo, gracias a mejoras en los materiales, lo que ha llevado a un mayor confort y una mejor salud ocular. La mayoría de las marcas utiliza hidrogel de silicona como material principal.
El hidrogel de silicona es un polímero que contiene hidroxietilmetacrilato (HEMA) y siloxano (Si-O). El HEMA es un monómero suave y flexible que tiene una alta capacidad de retención de líquidos y, en consecuencia, permite una transmisión relativamente eficiente de oxígeno. En combinación con el siloxano, se logra una excelente permeabilidad al oxígeno, lo que favorece una mayor oxigenación de la córnea.
El segundo grupo se refiere a las lentes de contacto rígidas permeables al gas (LC RGP). Aunque su uso ha disminuido en comparación con las LC blandas, siguen siendo una opción confiable para quienes optan por lentes de contacto rígidas.
Las LC RGP están fabricadas con materiales plásticos permeables al gas que permiten la oxigenación de la córnea. Entre los materiales más comunes se encuentran los copolímeros de silicona y acrilato, entre otros. Algunas empresas han desarrollado materiales que mejoran aún más la transmisión del oxígeno, y estos se reconocen por el sufijo «focom» en sus nombres.
Por último, las lentes de contacto esclerales son una categoría especial que no se apoya en la córnea. Son ideales para condiciones como queratocono, trasplantes de córnea, sequedad ocular severa y córneas irregulares. Estas lentes se explorarán en detalle en futuros artículos.
Importancia de la Oxigenación de la Córnea
La oxigenación adecuada de la córnea es esencial para su salud y funcionamiento. La córnea es la capa externa transparente del ojo que ayuda a enfocar la luz en la retina. Dado que carece de vasos sanguíneos, depende del oxígeno del aire y de los vasos sanguíneos circundantes del ojo.
El uso de lentes de contacto disminuye la exposición directa al aire, lo que reduce el suministro de oxígeno a la córnea. Por lo tanto, es crucial considerar la transmisibilidad del oxígeno al elegir lentes de contacto para garantizar la comodidad y la salud ocular.
La transmisibilidad del oxígeno se mide mediante el valor DK/t, que proporciona cada marca de lentes. Cuanto mayor sea el valor de DK/t, mejor será la transmisión de oxígeno. Sin embargo, esta medida no es la única consideración.
Otros factores, como la graduación del paciente (que influye en el grosor de la lente), el contenido acuoso de la lente (que afecta el grosor) y la tecnología y el material utilizados por cada marca, también deben tenerse en cuenta al seleccionar las lentes de contacto.
El contenido acuoso, expresado como porcentaje de agua (% H2O), es otro factor relevante en las lentes de contacto blandas. Si bien un mayor contenido de agua puede reducir la transmisión de oxígeno debido al aumento del grosor de la lente, proporciona una mayor comodidad al paciente. Sin embargo, esto puede aumentar el riesgo de rotura.
Es importante destacar que la elección de lentes de contacto es un proceso personalizado. A menudo, se requiere un ensayo y error para encontrar las lentes adecuadas para cada persona, independientemente de los valores de DK/t o % H2O proporcionados por las marcas.
En futuros artículos, compararemos los valores de DK/t de las principales marcas de lentes de contacto en el país para brindar recomendaciones más específicas.
Diferencias entre Lentes Blandas y Rígidas Permeables al Gas
Tanto las lentes blandas como las RGP pueden corregir problemas de visión como miopía, hipermetropía y astigmatismo. Esto significa que existen lentes de contacto esféricas (para miopía e hipermetropía) y lentes de contacto tóricas (para astigmatismo) en ambas categorías.
¿Entonces, por qué elegir unas sobre otras? ¿Por qué las RGP han perdido popularidad en favor de las blandas?
En primer lugar, las RGP son resistentes a la deformación, roturas y rayones. Son más estables y tienen una vida útil más larga. También son menos propensas a acumular proteínas, lípidos y otros residuos que pueden afectar la calidad de la visión y aumentar el riesgo de infecciones oculares.
Sin embargo, las RGP tienen un período de adaptación más largo debido a su rigidez. Además, la mayoría de las lentes blandas se venden en cajas con varias lentes, mientras que las RGP se compran individualmente. Esto significa que, en caso de pérdida o infección, se debe reemplazar toda la lente, lo que puede ser costoso.
Las lentes blandas han avanzado significativamente en términos de oxigenación de la córnea. Aunque solían ofrecer menos transmisión de oxígeno, ahora proporcionan niveles similares a las RGP. Además, las lentes blandas suelen ser más cómodas y fáciles de adaptar.
Las RGP siguen siendo la elección ideal para pacientes con alto astigmatismo y para aquellos que padecen queratocono, una enfermedad ocular en la que la córnea se adelgaza y adopta una forma cónica irregular.
Clasificación y Función de las Lentes de Contacto Blandas
Las lentes de contacto blandas se pueden clasificar de varias maneras. Aquí presentamos dos de las clasificaciones más comunes para ayudar a distinguirlas.
En primer lugar, la clasificación según el tiempo de uso. Las lentes de contacto blandas convencionales para uso diario permiten llevarlas durante 8 a 14 horas seguidas. Deben retirarse antes de dormir, limpiarse y almacenarse en estuches para su uso al día siguiente. Estas lentes suelen reemplazarse anualmente.
Dentro de esta categoría, existen las lentes de contacto desechables con reemplazo programado, que pueden ser diarias, quincenales, mensuales o trimestrales, dependiendo de la marca.
La segunda clasificación se basa en la función de las lentes de contacto blandas:
- Correctivas o compensatorias: diseñadas para corregir ametropías, anisometropías y/o presbicia (lentes de contacto multifocales).
- Terapéuticas: recetadas por oftalmólogos para fines médicos, como el posoperatorio. A menudo se utilizan después de cirugías oculares o trasplantes de córnea para promover la curación y brindar comodidad.
- Cosméticas: se utilizan para cambiar el color del iris con fines estéticos.
- Protésicas-cosméticas: tienen como objetivo disimular defectos patológicos y/o estéticos en la córnea e iris. Estas lentes también pueden corregir miopía, hipermetropía y astigmatismo, y algunas pueden tener una pupila estenopeica.
Estas dos clasificaciones permiten una combinación de conceptos. Los pacientes pueden optar por lentes correctivas y elegir entre opciones convencionales o desechables con reemplazo programado. También existen lentes cosméticas con graduación, disponibles en versiones convencionales o de reemplazo programado.
En el caso de las lentes terapéuticas, las lentes blandas de reemplazo mensual son una elección común debido a su suavidad y menor riesgo de irritación después de cirugías oculares.
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